Hoy quiero que mi cuerpo sea el que hable.

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Una caricia y derrite la piel, algunas palabras que inunden tus sueños, algunas imágenes que no te dejen descansar, algunas palabras para que no salgan de tu mente, para apoderarme de los sentidos de tu cuerpo, para volverme veneno y entrar por las venas para así recorrerte todo el cuerpo. Esconderme entre las sabanas y arrugarte con la respiración porque la noche amerita un par de acciones que dejen buenos recuerdos, murmurare al oído los planes para mañana mientras el tono de mi voz te arrulla en un sueño que repone, un sueño que de las fuerzas suficientes para el después.

Si tú quieres yo quiero, si caminas, yo primero. Tomados de las manos pasearemos en silencio para que los demás no se enteren lo que en realidad sucede, que cada paso tranquilice el deseo y después un abrazo que una cuerpos, un abrazo que me deje sentirte en secreto, una entrega del corazón con un par de palabras. Sí, yo también te amo e intento demostrártelo a diario aunque hoy me sienta cansada de la monotonía, hoy quiero hablar con el cuerpo porque las acciones ya las conoces, las palabras siempre las escuchas pero hoy dame sólo un poco de tu oscuridad, improvisa con tu sonrisa y contrastala con esa seriedad que puede tener. 

Si se puede dame la posibilidad de perderme contigo y crear poesía a medio terminar, dame un pedazo de piel, desnúdate de las ropas con la que te ocultas de los demás y que nadie se entere de lo que aquí esta por pasar. Hoy, porque estoy enferma y tu la medicina que quiero, porque con una mirada embrujare tus sentidos, porque encallo en tu vientre mientras hoy soy yo la que galopa en la noche, hoy porque hoy con un beso tierno se derrama la pasión necesaria. 

Si tú quieres yo te quiero, si tu dices que sí entonces yo primero, porque hoy quiero hablar con el cuerpo y que el tuyo sea quien escuche mis palabras a través del movimiento. Ya conoces las demostraciones de mi amor, ya te sabes al derecho y al revés las palabras que lo sintetizan pero hoy cansada de eso prefiero dejar que los sentidos se encarguen de todo eso.