Yo siempre consigo lo que quiero y no me figo en las cosas que debería, puedo evitar caer en la trampa, puedo evitar ser la persona malvada que se lleva lo que ve, debí fijarme bien esta vez. Ese momento en el que guardaste el anillo debió ser definitivo, debió ser crucial para marcharme y no volver ¿Como iba yo a saber que eras de ella? Yo la conocía bien y no me importa imaginar que probablemente serías tú. pero no soy la única culpable, ella debe aceptar lo que le toca, yo acepto mi parte y tú sobre todo deberías aceptar que hiciste mal.
He escuchado muchas veces decir que cuando hay problemas de pareja es cosa de dos nada más. Pensando que se refiere a que nadie se meta a decidir por alguno de los dos pues es justo decirlo así, pensando que nadie debe de interferir en el modo de resolución es muy justo decirlo de esa manera. Pero ahora me lo pregunto y no quedo conforme, no es sólo de dos… Hoy aquí en donde me metí bajo el encanto de tu mal me arrepiento un poco pero qué más da ya. Lo hecho, hecho esta. 
El problema no es sólo es mío de hecho yo soy la que sufro menos, pero la culpa es de todos, me duele decírtelo a ti que eres mi amiga; si es que aún así puedo llamarte de esa manera. Pero no escuches las cosas que hoy tiene que decirte pues primero que cada quien tome lo que le pertenece, que cada quien se haga cargo de su pare y entonces podemos hablar. La culpa de hacerme la inocente respecto a ustedes es mía, la culpa de no respetar tu posible posición en mi culpa pero la culpa de no haberte respetado y el amor que tenían es de él, la culpa de no ser lo que se debe es todos aunque más de él. La culpa de no ser cuidadosa y sobre todo lista es tuya.
Lamento decirlo así pero sí el tuviera lo que necesita no estuviera en todos lados buscando lo que no tiene o lo que no obtiene. Los parámentros en la relación era responsabilidad de los dos, no me culpes sólo a mí, no lo culpes sólo a él y tú no nos culpes ambas pues si una relación falla en primera estancia fue problema de ustedes dos.
