Mi destino es contigo. Sufriré la vergüenza de admitirlo. Aunque haya prometido que sería siempre para él, no lo siento más. Mi futuro es esta junto a ti. Aunque te rehúses, aunque lo niegues, aunque me rechaces. Estar contigo es como vivir bebiendo de fuente misma de la vida. Tu compañía es tan cálida como el sol de la tarde, tan dulce como el rocío por la mañana. Va cubriéndome de alegría.
Tu presencia es un bálsamo para mi piel, un tónico para mi alma. Tu compañía es un baño refrescante de vigor, de aire juvenil. Tu contacto es energía poderosa, que me electriza por la espalda.
Me vienen tantas ansias de tocarte, de sentirte, de saber que cuando estés junto a mí, te será imposible olvidarme. Uno a uno, tus obstáculos y barreras irán cayendo en el momento que me veas y te des cuenta que tengo razón, que eres para mí. Que soy para ti. Que el mundo nos hizo, para estar juntos, y es el momento de unirnos. Lo verás claro, limpio, entre todo ese montón de cosas que llamamos verdades, estaré yo. Me verás surgir clara como la mañana.
Ven, acércate, no me dejes sola. Haciéndolo podrás tener la seguridad de que no te faltará nada. Te supliré todo con mi cariño. Te daré mis afectos en abundancia para que no extrañes nada. Tengo tanto para ti. Espero que lo aprecies. Lo tendrás que notar en el momento que saborees todas las pasiones que contengo. Solo si vienes hacia acá. TE invito a intentarlo.
Si no lo haces, me consumiré en mis sentimientos, me quemaré en las pasiones que me impulsan. Me dejarás desamparada para que m cariño no me deje vivir. Ven, serás tú quien me salve, y verás que es por ti por quien vivo, la causa por la que siento todo esto. Quédate conmigo, que lo que siento nunca se acabará. Llenaré tus manos antes que pidas mi cariño. Date cuenta que tu indiferencia nos hace daño. No esperes más. Sálvame, sálvate.
Alicia Polanco
