Había momentos donde me llegue a sentir completamente sola y vacía, donde sentía que ya no podía seguir, que no tenía las fuerzas suficientes para levantarme del suelo y continuar con mi lucha.
Fue cuando comprendí que tenía que estar allí, que tenía que pasar por esa situación y ese sufrimiento, que tenía que pasar esas noches en vela sin poder dormir, tenía que pasar por esos arrebatos de locura y dolor para aprender a aclarar mis pensamientos, para poder aprender a controlar la situación. Dios nunca me dejo sola, él estaba ahí, escuchando mis suplicas, me estaba dejando soltar la rabia, el rencor y la desesperación que sentía por dentro para luego ayudarme a sanar mi corazón. Dios no te va a dar una batalla que no seas capaz de sobrellevar o de ganar.
Hay que tener en cuenta que si estás pasando por algo es porque obtendrás algo de ello, ya sea bueno o malo, puede ser que tengas que aprender una lección o que tengas que llevarte un aprendizaje de esa situación. Pues de lo malo también se saca una enseñanza, de lo malo también se aprende. Así que, si tu mundo se llena de obstáculos y tu camino se torna rocoso, puedes tener la certeza de que todo se solucionara pues Dios nunca nos abandonará, él nos dará la fuerza necesaria para continuar a pesar de las adversidades que se nos puedan presentar en la vida.
No tengas miedo o terror ante la posibilidad de caer, de fallar o de cometer errores, pues es normal que pase y de ahí vamos a ir aprendiendo poco a poco a sobrellevar la vida. Ten en cuenta que hasta los mejores guerreros y los mejores soldados se tienen que enfrentar a inevitables derrotas, pero está en cada uno de nosotros como seres humanos tener la fortaleza, la perseverancia, la constancia para levantarnos de nuevo y seguir luchando por mejorar cada día más. Dios nunca nos abandonará, él estará cuidando siempre de nosotros y nos regala un nuevo amanecer todos los días, donde podemos comenzar de cero para superar el día anterior con mucha valentía y con toda la disposición de ser cada vez mejor.
Yessica Sarcos