Me preguntaba ¿Por qué a los enamorados les da por escribir canciones y cartas de amor? Para mí el amor y la cursilería no tenían ningún sentido, todo eso me parecía absurdo.
Pero todo cambio cuando te conocí, pues ya esas preguntas no necesitaban respuestas, dejé a un lado la razón y empecé a sentir con mucha pasión y con el corazón. El amor comenzaba a tener un gran sentido en mi vida, finalmente entendía por qué el amor hace que las personas hagan cosas locas he inesperadas.
Yo comencé a hacer cosas que normalmente no haría, como decir cursilerías o utilizar todos esos clichés que se ven en las novelas románticas que tanto odié alguna vez. Tú lograste que fuera capaz de bailar al ritmo de cualquier canción en un lugar público, lograste que cantara canciones de amor solo para ti. Tanto cambiaste en mi la manera de ver el amor que sería capaz de sorprenderte con pequeños detalles que hagan la diferencia, con regalos sorpresas y miles de vivencias con tal de verte sonreír, con tal de hacerte feliz y hacer de tus días los mejores de tu vida. Pase más tiempo pensando en ti y en tú felicidad, pues tú felicidad es mi felicidad.
Aprovechaba cada minuto a tú lado, hacia tiempo para estar juntos, para acumular experiencias y vivencia. Hacía hasta lo imposible por estar a tú lado, con tal de no perderme ni un segundo de tú hermosa sonrisa, con tal de ver tú mirada infinita y llena de luz, con tal de rozar tus labios, besarte y abrazarte con mucha pasión. Sabes, al estar a tú lado podía sentir lo que es amor de verdad, lo que es sentir la verdadera felicidad, esa felicidad plena que te da esa persona especial, esa que te brinda un amor de verdad.
Tú lograste darle un nuevo significado al amor, me hiciste ver que no está tan mal ser un poco cursi y romántica de vez en cuando. Me enseñaste amar a plenitud y me demostraste que el amor es lo mejor que me pudo pasar en la vida.
Yessica Sarcos
